Hoy os vamos a enseñar como restaurar un volante antiguo para que parezca recién salido de fábrica, o casi… usando materiales que podéis encontrar por vuestro garaje o trastero.
Lo primero que se necesita para emprender un trabajo de esta envergadura es una buena base y resulta que nosotros la hemos encontrado en ese cofre del tesoro que es el garaje de Paco (nuestro piloto - mecánico). Buscando por aquí y por allí hemos dado con un volante Ranz de corte deportivo, que nos llegó en otro automóvil clásico que adquirimos hace mucho tiempo, pero eso es otra historia que no viene a cuento aquí (aunque puede que algún día os contemos)
Lo primero que se necesita para emprender un trabajo de esta envergadura es una buena base y resulta que nosotros la hemos encontrado en ese cofre del tesoro que es el garaje de Paco (nuestro piloto - mecánico). Buscando por aquí y por allí hemos dado con un volante Ranz de corte deportivo, que nos llegó en otro automóvil clásico que adquirimos hace mucho tiempo, pero eso es otra historia que no viene a cuento aquí (aunque puede que algún día os contemos)
Lo importante es que tenemos un volante con solera que casi estaba desahuciado pero que bajo los expertos cuidados de Paco, volverá a la vida para incorporarse de forma definitiva al Tartano.
Para ver todos los paso que Paco siguió os hemos preparado una presentación, ¡esperamos que os guste!
No hay comentarios:
Publicar un comentario